El miedo viene a informarte

Miedo, cuanto me has enseñado a poder mirar por TU ventana sin sufrir.

Has dolido tanto, me has atenazado y provocado una angustia tan infinita.

Me has incomodado, desequilibrado, bloqueado tantas veces, tantos años, pero miedo tu solo habías venido a ayudarme, a traerme un mensaje, un mensaje que ha cambiado mi vida, ahora lo sé.

Perdona por no haberte comprendido antes, tú no sabías hacerlo de otra manera que no fuera desde el temor a que volvieras a dormir en mi cama.

Ahora sé lo que querías decirme, sé a qué venias cada día a mi casa.

Ahora sé que sólo querías decirme que me amabas, que no querías que sufriera más, sé que no sabías hacerlo de otra manera que no doliera, ahora sé que solo querías amarme, cuidarme, que fuera feliz, que supiera quien SOY.

 

Escúchale desde el alma

 

Venías a decirme que no te permitiera más entrar en mis terribles noches, sólo querías decirme que era poderosa, que era valiente, que era firme y fuerte, que podía traspasar esa barrera de no mirarte a los ojos por no saber que me esperaba detrás de ti.

Ahora que te puedo mirar de frente…te amo, te amo como nunca antes porque ahora puedo entender que viniste a darme una noticia muy valiosa para mi.

Viniste a decirme que era libre de elegir, que era libre de vivir, que era un ser digno y poderoso.

 

Qué viniste a decirme

 

Me cuidaste tantas veces, te agradezco tantas cosas, me has enseñado tanto.

Ahora debo dejarte atrás, ahora elijo vivir en paz, libre y valiente sin ti, porque al mirarte a los ojos me enamoré, y ya no puedo llamarte miedo, porque ya eres parte de lo que soy hoy.

MIEDO, gracias por haberte conocido, gracias por hacer que mi vida cambiara y escogiera el camino del AMOR, que no hubiera conocido sin ti.