Los miedos son los principales altavoces de nuestro plan de trabajo personal, pero son tan incómodos, que huimos de ellos deseando que se esfumen y se vayan lo antes posible.
Te invito a mirarlos en perspectiva.
El miedo es el mayor bloqueador que conocemos, pero ¿qué se esconde tras él?
Muchas veces, ponernos delante de lo que hemos etiquetado de nuestro propio abismo, es lógicamente un momento de pánico, eso sí inventado.
Sientes la brisa de ese acantilado pegándote en tu rostro en tus brazos, tu pecho, todo tu cuerpo, ese es el momento en el que toda tu vida te pasa por delante y te dice que ni se te ocurra saltar, que no tienes alas, y que es mejor que de nuevo des media vuelta y te vayas por donde has venido, así de sencillo.
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En todo lo que ya te he contado, no sé si has destacado algo oculto en el texto, es una palabra, la palabra que lo diferencia todo, ¿sabrías decirme cual es?
Venga juega a buscar, a indagar y a descubrir qué palabra está marcando la enorme diferencia del que hace y el que no hace.
¿Qué palabra es?
La palabra que cambia todo es INVENTADO, ¿la habías notado?
Inventar es aquello que hacemos para justificar nuestras acciones, y sobretodo para justificar y anclar todos nuestros miedos.
Todos sentimos miedos, pero pocos son los que se aventuran a hindagar sobre su veracidad y sobretodo su objetividad.
Nos los creemos sin más, porque ello, aunque inconscientemente nos hace sentir la tranquilidad de no pasar a la acción, nos hace tener un argumento más que perfeco para no hacer, ¿te suena?
Todo lo que inventas, es una creencia que has construido en tu cerebro, a veces lo haces de manera consciente y otras, de forma inconsciente, por ello necesitas empezar a pasar a la acción con estas claves:
1.- Qué piensas cuando ves bajo de ti el abismo
Hay personas que se sienten muy inseguras sintiendo miedo, y en seguida tienen la necesidad de dejar de sentirlo y salir corriendo al refugio donde no sienten esa sensación de que el mundo está finalizando.
Por ello, dejan de mirar el abismo y es en ese momento cuando se hace imposible el desarrollo personal y su propia conquista.
De hecho huir de él, es lo que hace que tu miedo se haga cada vez más grande.
2.- Tus miedos son inventados, ¿lo sabías?
Si pudieras aguantar un poquito más mirando ese abismo que tanto miedo te da, sería maravilloso, y sobretod el paso diferenciador.
No te hablo de que para trascender el miedo tengas que sufrir, te hablo de que necesitas activar tu dosis de observación para poder iniciar tu aprendizaje a eso me refiero.
Aguantar un poco el miedo a que suceda algo, te da una información, y es que eso a lo que temes no se hace realidad, sin más, es un pensamiento a futiro, que nunca llega ni se materializa, pero para ello, necesitas aguantar el malesar que da sentir miedo y pasar y mirar y observar, y ver qué pasa.
3.- Qué conoces de tus conversaciones
Mientras miras el miedo, siempre que te atrevas a hacerlo, empieza tu viaje más revelador, el viaje de las conversaciones, aunque de esto te hablaré en otro capítulo.
Lo que sucede mientras miras tu miedo, es que inicias conversaciones, de esas que inicias a solas, ese diálogo interno que todos tenemos y que pasamos de largo, sin prestarle más atención, solo escuchándolos como si fuera la voz del vecino que del quinto, casi a modo susurro e ignorando qué puede estar contándote ese diálogo interno que tan bajito te habla.
4.- Autoconócete
No hay nada que defienda a más ultranza para trascender el paso a la acción que el autoconocimiento.
¿A qué me refiero?
Te hablo acerca de toda la información que aún no tienes de tí mismo, y que necesitas para avanzar en tu viaje con más recursos.
El autoconocimiento, lo trabajamos en el taller EL VIAJE DEL HÉROE. Te iré contando las próximas fechas en formato digital y presencial.