Cuando sueñas, parece que todo es de color de rosa, todo parece alcanzable, es un mundo al que deseas acceder e incluso lo vives como si fuera un lugar fácil de acceder.
Pero ¿qué pasa cuando queremos pasar de la visión a la acción?
Nos entran los 7 males, y empezamos a ver que ese sueño tal cual lo teníamos ideado en nuestra mente, se ha convertido en una especie de laberinto donde no encontramos la salida. Hemos quedado como atrapados en nuestro propio sueño, ¿te ha pasado esto alguna vez?
Pasar de la mente sensorial, la que siente haber llegado a ese lugar que estás deseando, a la mente racional que es la que nos ayuda a analizar nuestro plan de acción, las mejores estrategias, la que nos ayuda en la interpretación, y la que ve todos los límites de nuestros miedos; es un proceso duro que requiere de un mágico equilibrio.
Los sueños, al quererlos alcanzar a través de nuestro propósito, empiezan a hacerse cada vez más cuesta arriba, y ni tu mismo sabes cómo has llegado hasta ahí. Te preguntas, si ese sueño lo he creado yo, y deseaba tanto llegar a él, ¿qué está pasando por el camino para no alcanzarlo?
La pregunta clave es, ¿hay algo que puedas hacer diferente?
En este artículo quiero acercarte algunos tips, que al menos a mi me ayudaron en los momentos que los escritores llaman el síndrome de la página en blanco, y que me sacaron de bloqueos para no desistir de mi camino.
1 El primero de estos tips, es el sistema con el que convives. El estilo de relación con tu entorno es posible que te esté generando algún “robo energético”. Tengo algunos videos al respecto en este sentido, por lo que te dejaré los link debajo de este video, para que puedas echarle un vistazo. Ten presente que las personas de tu entorno (amigos, compañeros, familiares) te van a quitar la ilusión y las ganas de avanzar, si ellos no han logrado hacerlo, así que elige con quien compartir tus sueños, porque de lo contrario es posible que estés teniendo una fuga de energía.
2 El viajero cuando inicia su viaje de transformación, su viaje soñado, desarrolla una habilidad poco empleada hoy en día, la curiosidad. Para poder aventurarte e iniciar procesos de cambio, de transformación, necesitarás meter en tu maleta la habilidad de curiosear, la habilidad de ver que lo que está siendo en tu presente te trae una información que no tenías, y por ello como algo nuevo, le vas a prestar especial atención. Curiosear significa, dejarte empapar por la lluvia que cae del cielo sin molestarte por ello y abriéndote a la experiencia de esa nueva sensación.
3 Empieza a aliarte con tus miedos. Sé que decirte esto es una locura, porque sueño y miedo no entiendes que vayan de la mano, así que en este tercer tip si me lo permites te voy a poner del revés.
Los miedos aparecen en nuestra vida para que prestemos atención a algo que sin ellos no atenderíamos. A veces pensamos que, como hacíamos cuando éramos pequeños, los miedos se marcharían al cerrar los ojos, pero no funciona así. De la misma manera que sofisticamos nuestros sueños, sofisticamos nuestros miedos. Cuando unas en el mismo gesto, miedo y sueño, empezarás a descubrir (siempre que integres esa mirada curiosa), que los miedos han venido a tu presente a aportarte una linterna para que mires en la oscuridad. Préstales atención, ten paciencia al mirarlos y descubrirás la información que te vienen a dar.
4 Trae a tu presente las habilidades aprendidas en otros momentos. Estoy segura que este bloqueo que sientes en la actualidad no es nada comparado con otras situaciones que has vivido con anterioridad, y que pudiste trascender, que pudiste superar.
Y entonces, ¿qué te está pasando ahora? A veces hemos pasado por tantas situaciones dolorosas, que estamos cansados de vivirlas una y otra vez, por ello cuando vuelve a aparecernos en nuestro presente, es como si desconectáramos de poder traspasarlas, de poder decirles que somos más fuertes que ellas. Seguro que tienes habilidades y formas de hacer que son muy potentes, y que te funcionaron en tu pasado, ponlas en marcha ahora, pero con un matiz, préstales mucha atención y dales su espacio. Son recursos que quizás no integraste como aprendizaje en tu pasado así que ahora es el momento de hacerlo. Lo que está claro es que si esa situación, se te vuelve a presentar en tu presente, es porque aún necesitas prestarle más atención, no desistas porque estás muy cerquita de alcanzar tu sueño.
Los momentos de bloqueo, de silencio, nos traen información muy potente que nos permite, si aplicamos la curiosidad y el aprendizaje, DESCUBRIR, así que ponte las gafas de curiosear y a por todas.
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