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Empezaremos por tu estilo de liderazgo

 

No conviene empezar la casa por el tejado. Tu estilo de liderazgo para que impacte en tu equipo y en tu organización, debe contener la cultura y me explico.

Como líder de un equipo, seguro que ya te has dado cuenta que tu liderazgo contiene múltiples factores determinantes que marcan tu propio estilo

Sin lugar a dudas, ese estilo de liderazgo debe contener la cultura de la organización, para que tenga efecto en tu equipo y estés mandando mensajes coherentes a toda hora que permitan obtener los resultados de tu equipo.

El estilo de liderazgo es como tu ADN, marca una esencia y una forma exclusivamente tuya que impregna cada habilidad que muestras dentro de la organización, ya sea tu comunicación, tu negociación, tus peticiones, tu estilo de persuasión… todo está impregnado por esa genética que incluyes dentro de tu estilo de liderazgo.

 

Incluye la cultura en tu estrategia

 

Sin embargo, para que ese estilo de liderazgo no se vea mermado o anulado, debe incluir la cultura de la organización y la cultura en este símil que te vengo a desmenuzar hoy, viene a ser como las enzimas de tu cuerpo.

La cultura es el catalizador necesario para que la membrana del ADN realice su función. Sin catalizador no podría existir la esencia y función de todas las células de tu cuerpo.

 

Podrías tener las mejores células de todo cuerpo humano, pero no servirían de nada sin la labor del catalizador, sin la labor de las enzimas.

 

En el liderazgo pasa exactamente igual que en el perfecto sistema llamado cuerpo humano.

Puedes tener el mejor estilo de liderazgo que nunca antes haya pisado la organización, pero de nada servirá si no tienes en cuenta el disparador de ese potencial, o lo que es lo mismo la cultura de la organización en la que pretendes desplegar tu liderazgo.

 

Cultura y liderazgo deben ir de la mano para diseñar tu estrategia como líder y no solo eso.

Ambos deben estar alineadas en la misma dirección, hacia la misma visión, aunando fuerzas, remando juntos y enérgicos.

 

El video de la semana

 

 

 

Muchas veces, durante los procesos de selección de directivos en las organizaciones no se tiene en cuenta el factor CULTURA de la organización.

Incluso a veces, contratamos directivos casi con el título de superhéroes con el objetivo de que den un vuelco a la cultura de la organización.

Evidentemente cuando depositamos en manos del nuevo superhéroe, la función heroica de realizar un cambio cultural, lo único que conseguimos es «quemar» al directivo dejándolo solo ante el peligro.

 

Cambios que sean posibles

 

Sabemos que el nuevo directivo no tiene posibilidad de realizar un cambio y por supuesto queda aislado incluso del resto de compañeros que lo miran expectantes de que un día cercano se pegue el «batacazo».

 

Eso sí, la mirada del resto de compañeros siempre se realiza desde la barrera no vaya a ser que les pille a ellos como partícipes de esa «quema».

 

Para ello está la energía del nuevo líder que pronto acabará entendiendo que el desgaste es ingente y que es mejor unirse al bando de la vieja guardia, antes que morir en el intento.

 

Puede que al conocer la verdadera cultura de la organización decida abandonar el caballo de la ilusión de cambio, y aborte misión abandonando incluso la compañía.

 

Qué es la cultura y para qué sirve

 

La cultura es el póker de ases, siempre gana a cualquier estilo de liderazgo, por ello necesitas empezar por analizar la cultura de la organización antes de gastar energía gratuitamente en un cambio de rumbo de la compañía.

 

Cuando te incorporas nuevo a una organización es como cuando conoces a alguien y empiezas a verle defectos.

Piensas, «ya lo cambiaré», y sigues conociendole. Lógicamente lo único que pasa es que un día solo eres capaz de ver los defectos de la otra persona y necesitas tomar una decisión al respecto.

 

La cultura de las organizaciones se gesta durante mucho, mucho tiempo, a veces durante generaciones que se van heredando de uno a otro consejero, propietario o director general.

Es como un castillo que se va construyendo piedra a piedra.

 

Consonancia liderazgo y cultura

 

Por ello, tu liderazgo necesita estar en consonancia con la cultura de la organización en la que desarrollas tu labor de líder o de lo contrario el desgaste y la ineficiencia aparecerán como protagonistas de tu historia.

 

Al menos esta es mi particular manera de ver cultura & liderazgo.

Por supuesto no deja de ser mi opinión y vivencia tras años en grandes empresas de pretensión de cambio no alineadas con la cultura de la organizazión. S

 

Si la cultura era densa, no podía tener liderazgos ágiles y arriesgados; si la cultura era ombligocentrista, no podía tener liderazgos autónomos e intraemprendedores.

 

Analiza la cultura de la organización en la que desarrolles tu liderazgo antes de trazar tu Plan de Acción y cuéntame.

 

Test de Estilo de Liderazgo

 

Si te apetece puedes empezar por tu Test de Diagnóstico de Estilo de Liderazgo donde podrás conocer no solo tu estilo predominante sino algunas pautas o sugerencias.

A partir de la información, uedes empezar a trazar tu estrategia, tus puntos fuertes, tus áreas de mejora y una pincelada para tu autoconocimiento.

 

Déjame un comentario acerca de las sugerencias que te llevas de este artículo.

 

Me encantará leerte.

 

Paloma.